La Terminal de Pago para ti
Poner en marcha un negocio no es tarea fácil, sin embargo tampoco es una tarea imposible que necesite de mucho dinero, un financiamiento o prestamistas para ponerlo en marcha. En contra de la creencia popular, la mayoría de las empresas se ponen en marcha con el capital limitado para salir al mercado.
Iniciar con lo necesario es conocido en el ambiente del emprendedurismo como “bootstrapping”, y hacerlo tiene sus ventajas, pues si bien es cierto que se puede experimentar un crecimiento mayor con una inversión inicial fuerte, también se asume un riesgo financiero y el estrés que eso conlleva; además, sumar inversores a tu emprendimiento significa que la empresa le pertenece a más de una persona.
Empezar un negocio con poco dinero te permitirá alejarte del estrés y sentir la presión de los inversores que quieren ver su dinero reflejado en poco tiempo, cosa distinta a que si lo poco que tienes es tuyo y tú decides cuándo generar las ganancias adecuadas. Además, si por algún motivo más adelante tienes que vender tu negocio, esa decisión y el dinero son exclusivamente tuyos.
Los tiempos económicos actuales, alimentados por la pandemia mundial, han dado lugar a la creación de muchas empresas nuevas. Algunos han comenzado debido a la necesidad y otros han comenzado debido a un aumento del tiempo personal para crear una fuente de ingresos más deseable y fiable.
Es muy posible iniciar un negocio hoy en día con poco o ningún dinero, pero quizá te preguntes ¿qué necesito para lanzar un negocio? No te preocupes, te compartimos estos seis consejos que te permitirán escalar tu negocio sin acumular deuda o solicitar inversiones.
1. Construye el negocio con algo que te apasione
La mejor idea de iniciar un negocio es centrarte en torno a algo que te apasione y en lo que tengas un alto nivel de experiencia. Por ejemplo, si quieres empezar un podcast y monetizarlo a través de anuncios, deberías elegir un nicho que te apasione y sobre el que tengas un gran conocimiento.
Aunque la criptomoneda es un tema muy popular en la actualidad, sería muy difícil publicar contenido de calidad sin un conocimiento profundo del sector. Por otro lado, si eres un experto en la compra de casas, podrías crear un podcast con consejos e información útil. Tu pasión y experiencia darán lugar a contenidos que aporten valor y, a partir de ahí, tu tráfico, el tamaño de su audiencia, las impresiones publicitarias y los ingresos aumentarán a medida que sigas creando contenidos.
Empezar un nuevo negocio es muy duro al principio: se necesitan muchas horas y un trabajo tedioso. Tendrás muchas más posibilidades de superar esta etapa si tu negocio implica algo que realmente amas y disfrutas.
2. Lánzate cuanto antes: La perfección no existe y los errores ocurrirán
Un error muy común que cometen muchos empresarios primerizos es esperar a lanzarse hasta que sienten que todo es perfecto. Aunque la verdad no hay un momento adecuado para lanzar tu negocio, siempre encontrarás un pero o existirá algo que frene tu apertura.
No importa el tipo de negocio que inicies, siempre habrá cosas que deban ser ajustadas. Cuanto antes se lance, antes podrá identificar las áreas que necesitan ser arregladas y abordadas.
Pasar demasiado tiempo tratando de perfeccionar cada pequeño detalle antes de saber realmente qué áreas del negocio necesitan trabajo es una completa pérdida de tiempo. Muchas cosas se van a ir descubriendo sobre la marcha, y algunas de las mejores experiencias empresariales ocurren de esta manera.
La visión y la retroalimentación que recibes al trabajar en las trincheras no puede ser duplicada al anticipar o adivinar. Así que prepárate para cometer errores, surgirán problemas que tendrás que resolver y puede que te encuentres con uno o dos incendios que tengas que apagar. Todo esto forma parte del viaje, así que acéptalo.
3. Evita deudas a toda costa
Las deudas pueden paralizar tu negocio antes de que tenga la oportunidad de despegar, y el estrés que le causan a usted como propietario del negocio puede ser igualmente paralizante. Cuando empieces a acumular deudas -tarjetas de crédito o líneas de crédito-, tu atención se desviará a menudo de tu negocio.
En lugar de centrarte en el crecimiento de tu negocio, te consumes en el servicio de la deuda y en mantenerte a flote. Por supuesto, la deuda se puede utilizar estratégicamente y, en algunas situaciones, puede ayudar a un crecimiento más rápido, pero cuando estás empezando y tratando de validar tu idea de negocio, acumular deudas no es la mejor ruta a seguir.
4. Entender que las ventas curan el 99% de los problemas
Cuando estás empezando y tu negocio es nuevo, tu cliente objetivo no sabe quién eres. Es por ello que las primeras diez ventas siempre serán las más complicadas. Tienes que encontrar a ese cliente potencial y demostrarle por qué debería confiar en tu negocio y darte una oportunidad frente a otras opciones más establecidas. Si esto significa llamar por teléfono y derribar puertas para llegar a las personas adecuadas, hazlo.
Hay que estar dispuesto a hacer el esfuerzo. Además, mucha gente respetará el esfuerzo y te dará una oportunidad basándose únicamente en eso.
"Número uno: Las ventas lo curan todo. No ha habido ninguna empresa en la historia de las empresas que haya tenido éxito sin ventas. Cualquiera que te haya dicho alguna vez: 'No te preocupes por las ventas, puedes crecer y preocuparte por las ventas más tarde', te está mintiendo. Ellos fracasarán, tú fracasarás. Tienes que ser capaz de vender y ¿sabes quién tiene que ser el mayor vendedor de tu empresa? Tú".
Así lo explica el empresario estadounidense, Mark Cuban, pues cuando tienes ventas -y haces que las ventas sean la máxima prioridad- evitarás muchas cuestiones y problemas, y si surgen, puedes sanarlos rápidamente.
5. Estar dispuesto a ser todólogo
Cuando se inicia un nuevo negocio, hay múltiples funciones que tendrás que hacer, desde el marketing y las ventas hasta la contabilidad y el servicio al cliente. Cuando inicias con poco dinero, lo que tienes que hacer es reinvertir la mayor cantidad posible de ingresos en el crecimiento, por lo que a menudo esto significa retrasar la contratación de empleados.
Entonces, ¿quién va a encargarse de todas estas funciones? ¿Quién va a responder a las solicitudes de atención al cliente? ¿Quién va a trazar y ejecutar la estrategia de marketing? ¿Quién va a ser el mejor vendedor? La respuesta: tú.
Cuando uno acepta hacer malabarismos con varias funciones y llevar varios cargos, es mucho más fácil manejar la carga de trabajo. Si hay aspectos del negocio que desprecias y temes, lo vas a tener difícil.
Tampoco se trata de que te vuelvas un experto amante de la contabilidad, por ejemplo, pero sí tienes que estar dispuesto a manejarla hasta que el negocio esté en un nivel en el que la externalización de tareas específicas tenga sentido financiero y no añada peso y estrés innecesario sobre tus hombros.
6. Negociar todo
Cada céntimo que se ahorra en gastos, desde el inventario hasta los costes de marketing y el software, es dinero que puede utilizarse para hacer crecer tu negocio. Así que negociar todo desde cada servicio o producto que pagues es importante en el inicio.
Pide un descuento o mira si tienen algún código de descuento u ofertas que puedas aprovechar. Todas las empresas quieren atraer y retener nuevos clientes. A menudo, si una empresa ve una posible relación a largo plazo con su negocio, te hará algún tipo de oferta para ahorrar dinero.
Eso sí, nunca sabrás si no preguntas. Si aplicas este enfoque a toda tu empresa, el ahorro puede ser considerable. Una nueva empresa puede aprovechar el ahorro, por mínimo que sea, y canalizar ese dinero extra en más publicidad, materiales más caros o cualquier idea que conduzca a más ventas.
Se trata de tener la visibilidad a dónde va tu dinero, así que una buena idea es para que nada se te escape es tener una cuenta de débito empresarial. No es complicado y cada vez hay más posibilidades de encontrar una que sea adecuada para tu negocio. Recuerda que no debes juntar el dinero de tu negocio con el personal para mantener una mejor administración.
Esperamos que estos consejos te ayuden a tomar la decisión de lanzar tu negocio y que por fin el mercado conozca el producto o servicio que ofreces. Si no lo haces ahora, alguien más podría ganarte la idea. ¡Mucha suerte en tu emprendimiento!
