La Terminal de Pago para ti
Chubbies es una dark kitchen en la Ciudad de México, creada por Rodrigo Torices, que debido a la pandemia abrieron bajo este esquema. Un nombre nuevo para emprendimientos que ya se habían visto, pero con el buen uso de las tecnologías a nuestro alcance, tienen otra dimensión, pues gracias a su estrategia de redes sociales, Chubbies creció como la espuma.
Atrás de la cámara, Rodrigo se nota alegre y cada que platica sobre su emprendimiento se nota el entusiasmo que le causa. Él decidió emprender esta idea desde marzo, como un restaurante con un menú limitado pues únicamente ofrecerían hamburguesas, papas y refrescos, su idea era enfocarse en un solo producto y perfeccionarlo, y lo logró.
“Solo damos servicio para que recojan su pedido o si lo prefieren lo llevamos a cinco kilómetros a la redonda”, dice Rodrigo, quien también señala que le tomó tiempo llegar a su receta final, pues realizó una serie de pruebas para llegar a lo que actualmente ofrecen: carne y cebolla.
“La idea era abrir un local en marzo o abril, pero pasa esto de la pandemia y nos detiene los planes; nos desesperamos y encontramos una solución: las dark kitchens. En agosto decidimos abrir en este formato, en la cocina de casa de un amigo, y creo que fue mejor que abrir un local porque hemos tenido muchísima demanda”.
El reto de las cocinas fantasma es que la gente las conozca, pues al no haber un local comercial deben encontrar otras formas de publicitarse, pues no hay folletos o manera física de hacer la promoción, y es aquí donde entran las redes sociales y sin duda así lo cree Rodrigo “es tu mejor herramienta de publicidad… pero apoyado a esto, también el boca en boca”.
El boca en boca movió la marca
Si bien las redes sociales son el espacio en donde dan a conocer sus productos, ofrecen atención al cliente y muestran sus horarios de atención, también las recomendaciones y fotos de todas las personas que comparten su experiencia en redes sociales, han sido los factores que mueven a Chubbies.
“Creo que teniendo un buen producto y que a la gente le guste la marca (dan como resultado) que la recomiende muchísimo y esa creo que ha sido nuestra mejor publicidad. No hemos invertido en pauta ni nada de eso, todo ha sido de boca en boca”, confiesa Rodrigo, quien sabe de esto pues su empleo de tiempo completo está relacionado al marketing digital.
Eso sí, confiesa que en un inicio simplemente se acercó a amigos y familiares, para que conocieran su emprendimiento. Sin embargo, a la gente le gustó y poco a poco, amigos recomendaron a amigos, y los familiares también hicieron su parte. Además el concepto era interesante: todo lo pedías en las redes sociales y te llegaba a casa.
Eso, aunado a la estrategia de redes sociales, las opciones de cobrar en línea, en efectivo o con tarjeta que ofrecían, así como un proceso sencillo de ordenar, convertían a Chubbies en toda una experiencia, pues curiosos por el simple hecho de conocer cómo funcionaba, las pedían, pero quedaban fascinados con su sabor.
“Los comentarios eran porque alguien las recomendó, un medio, un foodie, eso nos ayudó muchísimo, tanto que cada semana teníamos que modificar la cocina porque tuvimos que crecer el equipo y materia, porque la demanda nos estaba comiendo”.
Y a pesar del crecimiento, la forma de trabajo simplemente se iba adaptando, pues su plan era muy claro: tomar la orden vía WhatsApp, apuntarlo en un Excel y que lo pagaran por medios digitales. “Nosotros llevamos un control que nos permite decir a qué hora están listas tus hamburguesas, pero mucha gente se desespera porque quiere todo de inmediato”.
El problema que plantea Rodrigo es común, pero asegura que todos los fines de semana están trabajando en corregirlo: “como todo sucede durante el fin de semana, el lunes tenemos la oportunidad de hacer una retrospectiva y ver qué nos fallo y cómo lo podemos mejorar. En la semana planeábamos todo y el viernes de nuevo era probar con todo lo nuevo que metimos”.
Crear expectativa
Si bien Chubbies solo está disponible los viernes, sábados y domingos, a veces tienen eventos especiales o como ellos lo llaman “Chubbies Night”, en donde en un día a la semana fuera del horario normal, deciden que venderán hamburguesas y con un límite de disponibilidad, por lo que urgen a sus seguidores a apartar la suya con días de anticipación.
De esta manera han creado un método de demanda importante: solo tienen ciertos días y la gente puede ir apartando sus alimentos con anticipación, así que quienes vayan conociendo la marca, más les vale hacer el pedido desde antes o podrían quedarse con las ganas de probar una buena hamburguesa.
Esto poco a poco sus clientes lo van entendiendo, cosa que les costó trabajo porque a lo que estamos acostumbrados es a ir, pedir y recibir tu comida, pero este negocio no funciona así. “Ya tenemos unos cinco clientes que cada fin de semana piden”, presume Rodrigo.
Además, otra cosa es que no puedes contactar a Chubbies por ningún otro medio que no sean los que ellos tienen. Decidieron no optar por las apps de delivery, en primera porque cobran cerca del 30% del pedido, y en segunda porque no tiene tanta capacidad para satisfacer las necesidades del delivery.
Es decir, si el éxito les hubiera llegado a través de las apps, tendrían un problema por no poder dar abasto a los pedidos y tiempos de entrega, lo que convertiría a la cocina en un caos total y, por lo mismo, convertirse en una desventaja más que una ventaja.
Por eso mismo ellos tienen el control de todo, desde el pedido, los extras o detalles sobre él, hasta el envío, pues cuentan con una cuadrilla de repartidores, es por ello que no van a más allá de 5 kilómetros a la redonda, ya que les tomaría más tiempo y esfuerzo del necesario y sus órdenes se verían retrasadas.
La venta digital
Rodrigo ve una ventaja importante en abrir una dark kitchen, en primer lugar porque te ahorras la renta de un local, la contratación de meseros, la compra de mobiliario y muchas otras cosas que implica abrir un local, pero señala que no se trata de ahorrarse ese dinero, sino invertirlo en otras necesidades.
“A mí me ha funcionado muchísimo… no necesitas una gran inversión para abrir tu negocio, pero sí debes invertir en tu imagen… estamos pagando a una persona para que nos esté haciendo diseños, mandando posteos…”
Es aquí donde Rodrigo explica que la identidad de marca es muy importante para ellos y un negocio que no tiene una sucursal tienen que mostrar su identidad a través de las redes sociales, por ello son parte fundamental del negocio. “A nosotros nos funcionó que 'el chubbie' es un muñeco gordito y bonito, le gusta a la gente y es una palabra fácil de recordar”.
Con esto, queda claro que el 2021 es necesario que los negocios comiencen a vender en línea, pues de acuerdo a la Asociación Mexicana de Venta Online, el comercio electrónico creció un 81% en 2020 y generó un valor de 316 mil millones de pesos, lo que representó el 9% al retail del país